La Ciudad de México genera más de 5 millones de m3 de cascajo al año, que no necesariamente debe considerarse como desperdicio. Con el manejo adecuado, esta cantidad de material es susceptible de reutilizar en diversas construcciones, pero, de acuerdo con la empresa Concretos Sustentables Mexicanos (CSMX), es muy poca la proporción de cascajo que se recicla: en sus plantas recibe anualmente tan solo 500 mil m3, el cual convierten en concreto hecho con material reciclado.
Para ello, CSMX cuenta con una de las primeras plantas recicladoras de Latinoamérica avalada por la Federación Internacional de Reciclaje y por la Asociación Mexicana de Reciclaje de Residuos de Construcción y Demolición. El concreto premezclado que logra fabricar ha sido utilizado en edificaciones y como concreto hidráulico en obras públicas.
El proceso de reciclaje comienza con el servicio de acarreo y traslado de cascajo desde alguna obra hasta cualquiera de sus dos plantas de reciclaje; continúa con el procesamiento de estos residuos (sin importar con lo que estén mezclados) y finaliza con la producción de concreto con algún agregado reciclado.
Luego de que en abril de 2023 se aprobara la reforma a la Ley de Residuos Sólidos de la Ciudad de México, que establece que todas las personas que realicen obras de construcción deben contar con un convenio o contrato con una planta de reciclaje de residuos, Concretos Sustentables Mexicanos ha creado alianzas con otras empresas para asegurar su cumplimiento y disminuir el impacto ambiental en las construcciones y demoliciones del sector público y privado.
Entre la lista de productos que se pueden elaborar con cascajo reciclado se encuentran el concreto, relleno fluido, módulos de ruptura, mezcla asfáltica tibia, bloques de concreto ensamblables, grava de 3/4 y 3/8, arena controlada y base hidráulica, estas últimas completamente recicladas.
Las obras hechas con concreto sustentable se diseñan y construyen teniendo en cuenta la reducción de contaminantes y la eficiencia en el uso de recursos. En ese sentido, los productos de CSMX aseguran el uso de materiales fuertes, resistentes y duraderos que pueden emplearse en ciclovías, canchas deportivas, parques públicos, bases, naves industriales, banquetas, guarniciones y demás cimentación.
