la posible vacuna contra el cáncer de piel
Uno de los grandes retos de los investigadores en el ramo oncológico es desarrollar una vacuna que llegue directamente al sistema inmune del paciente para que ésta identifique a las células cancerosas como las enemigas a vencer y pueda combatirlas tal y como lo haría si detectara una infección de cualquier tipo, pero sin destruir ni dañar las sanas, como lo hace la quimioterapia.
Partiendo de esta idea, un grupo de científicos ha creado NeoVax, una vacuna de larga duración que actúa dirigiéndose a las proteínas específicas en las células cancerígenas que provocan melanoma.
El estudio, realizado por el Instituto de Cáncer Dana-Farber, el Hospital Brigham and Women's y el Instituto Broad del MIT y la Universidad de Harvard, y publicado en la revista Nature Medicine, dice que cuatro años después de que un grupo de ocho pacientes con melanoma fueran tratados con NeoVax, la respuesta inmunológica sigue siendo eficaz para mantener las células cancerosas bajo control.
NeoVax está hecha de fragmentos de proteínas, llamados epítopos, que emergen de la superficie celular y sirven como señales para el sistema inmunológico.
Los epítopos de NeoVax provienen de neoantígenos, que son proteínas anormales en las células tumorales que advierten que una célula es cancerosa y debe destruirse. Debido a que los neoantígenos se encuentran sólo en dichas células, desencadenan una respuesta inmune que evita el ataque a las células sanas.
"Estos hallazgos demuestran que una vacuna de neoantígenos personal puede estimular una respuesta inmune duradera en pacientes con melanoma", comentó la doctora Catherine J. Wu, colíder del estudio.
Para fabricar NeoVax, se escanea la secuencia de ADN en el tumor de un paciente para identificar los epítopos clave dentro de los neoantígenos de las células tumorales. "Cuando un paciente es tratado con NeoVax, los epítopos generan una respuesta del sistema inmunológico contra cualquier célula de melanoma que los presente", argumentan los investigadores.